No puedo huir de lo que soy.
Pero de ti sí.
Y de tu vida, tu odio, y esa manera de quererme que nunca entendí.
Estamos en bandos distintos en esta guerra y por fin me he dado cuenta.
Tu eres el norte y yo soy el sur.
Pero no pienses que voy a rendirme por ti.
Y ojalá que algún día yo te duela tan fuerte. Y ojalá que ese día yo ya no te quiera.
Pero ahora no dejes de dolerme para saber que tengo que mantenerme fuerte.
Oinshhhh a veces no llueve no duele tanto Como se prevee, ojalá pase pronto el temporal 😉
ResponderEliminarMuy bueno!
ResponderEliminarSaludos